Representantes del bloque Mercosur se reunieron en Brasil el viernes, mientras fuentes diplomáticas de la UE dijeron que un acuerdo comercial largamente retrasado podría firmarse el 12 de enero.
Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay esperaban finalmente sellar el sábado un acuerdo con la UE para crear la zona de libre comercio más grande del mundo.
Sin embargo, el acuerdo, que se ha estado negociando durante más de 25 años, encontró una feroz oposición de los agricultores, especialmente en Francia e Italia, y ahora se pospuso hasta enero.
Varios diplomáticos en Bruselas dijeron a la AFP que la UE estaba trabajando para lograr una firma el 12 de enero en Paraguay, que asumirá el liderazgo del Mercosur de manos de Brasil en 2026.
La jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo que confiaba en que habría una “mayoría suficiente” entre los 27 países de la UE para aprobar el acuerdo el próximo mes.
El acuerdo comercial ayudaría a los 27 países de la Unión Europea a exportar más vehículos, maquinaria, vinos y bebidas espirituosas a América Latina.
A cambio, facilitaría la entrada a Europa de carne, azúcar, arroz, miel y soja sudamericanos.
Algunas naciones de la UE, como Alemania, España y los países nórdicos, están entusiasmadas con un pacto que podría ayudar a impulsar las exportaciones en un momento de tensiones comerciales globales.
Agricultores enojados retrasan el pacto
El acuerdo propuesto ha provocado ansiedad entre los agricultores de París y Roma, que temen verse perjudicados por un flujo de productos más baratos procedentes del gigante agrícola Brasil y sus vecinos.
Miles de agricultores protestaron por el acuerdo frente a una reunión de líderes de la UE en Bruselas el jueves, y alrededor de 1.000 tractores entraron en la ciudad haciendo sonar sus bocinas.
Los manifestantes encendieron hogueras y arrojaron patatas y otros objetos a la policía, que respondió con gases lacrimógenos y cañones de agua.
Las demandas de protecciones más sólidas obligaron a la Comisión Europea a anunciar un aplazamiento de la ceremonia de firma prevista para el sábado.
Lula advirtió el miércoles a la UE que firmara el acuerdo ahora o lo olvidaría mientras él estuviera en el poder.
Sin embargo, dijo el jueves que la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, le había pedido “paciencia” e indicó que Roma eventualmente estaría lista para firmar.
Después de la cumbre de Bruselas, el presidente francés, Emmanuel Macron, dijo que era “demasiado pronto” para decir si París respaldaría el acuerdo el próximo mes, afirmando que se necesitaban cambios fundamentales en el texto.
Una fuente del gobierno brasileño dijo que el pacto comercial ya contenía salvaguardias para los agricultores de la UE, pero “vemos que la situación política interna en Francia es delicada”, añadió la fuente.
El viernes, decenas de agricultores franceses protestaron frente a la residencia costera del presidente Emmanuel Macron, esparciendo estiércol en las cercanías para demostrar el acuerdo comercial del Mercosur y otras quejas.
Alemania optimista
A pesar del retraso, el canciller alemán Friedrich Merz está “muy contento, porque la cuestión ya no es si (el acuerdo se firmará) sino cuándo”, dijo a la prensa en Berlín el portavoz del gobierno, Sebastian Hille.
Dijo que el gobierno alemán esperaba que el proceso se completara “en las próximas dos o tres semanas”.
La reunión del Mercosur comienza el viernes con conversaciones ministeriales en Foz de Iguaçu, en el sur de Brasil, hogar de uno de los sistemas de cascadas más grandes del mundo en la frontera con Argentina.
El sábado, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunirá con su homólogo uruguayo, Yamandú Orsi, el presidente de Paraguay, Santiago Peña, y el agitador presidente de Argentina, Javier Milei.
Milei provocó controversia esta semana con una publicación viral en Instagram que muestra un mapa de América del Sur que muestra a Brasil como un enorme barrio marginal, mientras que Argentina y Chile, que acaban de elegir a un líder de extrema derecha, se muestran como futuristas.
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por Juan Sebastián Serrano, AFP