Puntos clave El diferencial de riesgo país de Argentina cayó a alrededor de 500, desde alrededor de 625 la semana pasada y cerca de 1.050 a mediados de octubre. A partir del 1 de enero de 2026, el Banco Central ajustará la banda cambiaria del peso utilizando la inflación mensual y ejecutará un plan estructurado de acumulación de reservas vinculado a la liquidez. La caída revive los rumores sobre el endeudamiento internacional en 2026, incluso cuando Argentina sigue siendo el riesgo atípico de América Latina. El diferencial de riesgo país de JPMorgan de Argentina -una abreviatura del interés adicional que los inversores exigen para prestar dólares al país- se movió cómodamente por debajo de los 600 puntos básicos esta semana y se negoció alrededor de los 500. Los inversores están reaccionando a un conjunto de reglas más claras.
Primero, la banda cambiaria. Argentina mantendrá la banda, pero a partir del 1 de enero de 2026 el techo y el piso se ajustarán cada mes en línea con la última lectura de inflación mensual, con un desfase, reemplazando el rastreo fijo anterior.
En pocas palabras, los parámetros oficiales se acercarán al ritmo de los precios internos, reduciendo el riesgo de que se genere silenciosamente un gran desajuste.
El riesgo país de Argentina cae a alrededor de 500 después del reinicio del Banco Central. (Foto reproducción de Internet) En segundo lugar, las reservas. El Banco Central dijo que profundizará su programa monetario para acumular dólares de manera consistente con la demanda de dinero y la liquidez diaria del mercado cambiario.
Estabilización con ruedas de entrenamiento Las descripciones públicas del mecanismo apuntaban a una posible acumulación de reservas de aproximadamente entre 10.000 y 17.000 millones de dólares, con compras anticipadas alineadas con alrededor del 5% del volumen diario del mercado de divisas. Las reservas son importantes porque son el amortiguador que ayuda a un plan de estabilización a sobrevivir a las crisis.
Los mercados se movieron rápidamente. El peso mayorista cotizaba alrededor de 1.449 por dólar, los futuros mejoraron después de una devaluación el día anterior y el índice S&P Merval subió.
Fuera de Argentina, la cuestión es que los diferenciales en los 500 siguen castigando, pero ya no constituyen un bloqueo total. Es por eso que los escritorios de Wall Street están discutiendo un regreso a los mercados internacionales de deuda a principios del próximo año, y por qué las empresas que valoran la curva soberana están observando la ejecución de la política.
Argentina está mejorando, pero no “ha vuelto a la normalidad”. Los diferenciales regionales recientes sitúan a Argentina cerca de 559 puntos básicos, frente a alrededor de 198 de Brasil, 221 de México, 280 de Colombia, 90 de Chile, 124 de Perú y 62 de Uruguay.