Los datos del gobierno enviaron una advertencia al presidente Javier Milei el jueves cuando los estadísticos revelaron que la inflación se aceleró el mes pasado por encima de las expectativas de la mayoría de los analistas.
Los datos del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Argentina, seguido por la oficina nacional de estadísticas INDEC, muestran que los precios aumentaron un 2,5 por ciento en noviembre, 0,2 puntos por encima del 2,3 por ciento registrado en octubre.
Como resultado, la inflación acumulada durante los últimos 11 meses aumentó al 27,9 por ciento, con los precios aumentando un 31,4 por ciento interanual.
Si bien la noticia preocupará al gobierno de Milei, la cifra no fue inesperada. La inflación se ha mantenido por encima del umbral del dos por ciento durante tres meses consecutivos y se ha acelerado durante los últimos cuatro.
La mayoría de los analistas y firmas consultoras privadas habían pronosticado una tasa de entre 2,3 y 2,5 por ciento.
Vivienda, agua, electricidad, gas y otros servicios públicos lideraron los aumentos de noviembre, con un aumento del 3,4 por ciento. Transporte (tres por ciento) y alimentos y bebidas no alcohólicas (2,8 por ciento) fueron las categorías con mayores incrementos en el penúltimo mes del año.
Los aumentos más bajos fueron ropa y calzado con un 0,5 por ciento y equipo y mantenimiento del hogar, un aumento del 1,1 por ciento el mes pasado.
La aceleración mensual estuvo en consonancia con los precios en la capital, que subieron un 2,4 por ciento el mes pasado, según el instituto IDECBA del Ayuntamiento. En los primeros 11 meses del año, los precios en la Ciudad de Buenos Aires aumentaron 28,3 por ciento, dijo el organismo.
Los economistas y consultoras consultados por el sondeo REM de expectativas de mercado del Banco Central habían pronosticado una tasa de entre 2,3 y 2,5 por ciento, destacando los aumentos de precios de alimentos y bebidas no alcohólicas, servicios públicos y transporte. La inflación anual se estima ahora en 30,4 por ciento.
Si bien la cifra está muy lejos de la inflación anual de tres dígitos registrada durante el gobierno anterior, Milei y su equipo económico predijeron audazmente a principios de este año que la tasa mensual sería del uno por ciento en diciembre.
Al menos dos consultoras pronosticaron esta semana que la inflación en el último mes del año será del 2,3 por ciento.
La consultora Equilibra había situado la inflación de noviembre en un 2,5 por ciento, impulsada por los aumentos en vivienda, agua, electricidad y servicios públicos, transporte y comunicaciones. Ahora ve una tasa anual del 31 por ciento.
Otra empresa, EcoGo, también estimó un 2,5 por ciento, impulsada por un aumento del tres por ciento en los precios de los alimentos, sobre todo la carne y la fruta. “Noviembre fue un mes de normalización pero también de correcciones, lo que ayudó a mantener la inflación en aumento”, subrayó su análisis.
La Fundación Libertad y Progreso proyectó la inflación de noviembre en 2,3 por ciento, con una tasa interanual de 31,2 por ciento.
Con la inflación estabilizada en cerca del dos por ciento mensual a finales de año, pero sin dar señales de una caída más pronunciada, el equipo económico de Milei sigue de cerca la evolución de tres variables clave en diciembre y enero: precios regulados, alimentos frescos (carnes y frutas) y costos de transporte y energía.
– TIMES/NA/PERFIL
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