Amados, muchas veces se teme a la ira, afrontada como una sombra o un enemigo. Pero la ira es una llama viva, un fuego sagrado que arde dentro de nosotros, revelando nuestra verdad, nuestra fuerza y el coraje que pulsa en el alma.
Ella no destruye cuando es adoptada. No encarcela cuando siente con conciencia. La ira consciente es un Portal de Transformación, un pasaje para romper con lo que nos limita y dejar espacio para la libertad.
MAESTROS DE LA FURIA TRANSFORMADORA:
YESHUA (JESÚS) nos enseñó que la ira puede ser luz y liberación. Al expulsar a los vendedores del templo, nos mostró que la indignación acorde con la verdad es una llama viva de Justicia, Protección y Transformación.
EL MORYA, Maestro Ascensión de la voluntad, el coraje y la acción justa, nos invita a sentir el fuego interior sin miedo, canalizando la ira en fuerza creativa, rompiendo ataduras, patrones y situaciones que ya no nos sirven.
>Cuando está bien dirigida, la ira no destruye. Ella despierta. Ella lo libera. Ella nos conmueve, nos eleva y nos conecta con nuestra verdad más profunda.
CUERPO, MENTE Y ALMA: la ciencia de la ira
En el cuerpo, la ira enciende el sistema límbico, activando áreas del cerebro conectadas con la atención, la acción y el coraje. Es el cuerpo que dice: “Hay que transformar algo, hay que liberar algo”.
En psicología, la ira consciente es una herramienta de Autoconocimiento, Protección Emocional y Refuerzo de la Autoestima. Reprimida, se convierte en peso, tensión, patrones repetitivos, vínculos que nos aprisionan y energía que no fluye.
– BENEFICIOS DE LIBERAR LA IRA CONSCIENTE:
Cuando conscientemente sentimos y liberamos nuestra ira:
Protegemos nuestra energía: establecemos límites claros, seguros e inquebrantables.
Fortalecemos la autoestima: reconocemos nuestros derechos, necesidades y nuestra verdad.
Romper lazos y patrones negativos: las personas, los lugares y las situaciones que nos limitan pueden dejarse ir.
Convertimos la energía en liberación: abrimos espacio para experiencias superiores, para conexiones que vibren en amor, coraje y verdad.
CUANDO ASFICAMOS NUESTRA IRA:
Perdemos energía vital, fuerza creativa y claridad.
Mantenemos vínculos que no nos sirven, repetimos patrones y alimentamos la inseguridad.
CÓMO TRANSFORMAR TU FUEGO INTERIOR:
1. Siente la ira con valentía, sin miedo y sin culpa.
2. Respira profundamente, llevando presencia y conciencia a cada célula de tu cuerpo.
3. Canaliza la energía: muévete, escribe, di tu verdad, actúa con valentía y firmeza.
4. Visualice a Jesús y El Morya envolviendo su ira en luz dorada y azul, transformándola en FORTALEZA, PROTECCIÓN y LIBERACIÓN.
>Cada chispa de ira consciente es un portal. Cada ola de indignación es una invitación a la ruptura, a la liberación y al renacimiento.
Amados, no temáis el fuego que arde en vuestro interior. No destruye, despierta. No encarcela, libera.
Sentimos, respiramos, transformamos. Tu ira es un instrumento divino, una llama sagrada que abre caminos de valentía, transformación y ascensión.
Respira, siente, libera. El fuego que arde en ti es sagrado. Él es tu aliado. Él es tu portal.