El sorteo de la Copa del Mundo de 2026, la mayor edición de la máxima competición mundial del fútbol jamás celebrada, se llevará a cabo en Washington el viernes y se espera que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ocupe un lugar destacado en el proceso.
El torneo ampliado de 48 equipos, en comparación con los 32 países que compitieron en la Copa Mundial de Qatar 2022, se jugará en Estados Unidos, México y Canadá del 11 de junio al 19 de julio del próximo año.
La asistencia de Trump a la ceremonia del Centro Kennedy subraya su relación con el jefe de la FIFA, Gianni Infantino, quien ha realizado varias visitas a la Casa Blanca e incluso se unió a Trump en cumbres internacionales en los años transcurridos desde que la candidatura norteamericana conjunta obtuvo el torneo en 2018.
Se espera que la estrecha relación de Infantino con Trump haga que el líder estadounidense sea nombrado el primer ganador de un nuevo Premio de la Paz de la FIFA, que se entregará en el sorteo.
Trump ha hecho de la Copa del Mundo un evento central tanto de su segunda presidencia como del 250 aniversario de la independencia de Estados Unidos el próximo año.
Pero no ha dudado en incorporar la política interna al evento, amenazando con trasladar los partidos de la Copa del Mundo a ciudades gobernadas por demócratas si considera que las condiciones son “inseguras”.
En una señal de las tensiones globales en torno a una Copa del Mundo que tendrá 11 de sus 16 sedes en Estados Unidos, Irán dijo que boicoteará el sorteo porque las autoridades estadounidenses se negaron a otorgar visas a varios miembros de su delegación.
El presidente de la federación iraní de fútbol, Mehdi Taj, afirmó: “Le hemos dicho al director de la FIFA… que se trata de una posición puramente política y que la FIFA debe informar [Washington] desistir de este comportamiento.”
Clasificatorios por primera vez
Los aspirantes al título que una Argentina inspirada por Lionel Messi ganó por tercera vez en 2022 en Qatar se dividirán en 12 grupos.
Los principales favoritos son Argentina, los países anfitriones EE.UU., México y Canadá, el cinco veces ganador Brasil, el dos veces campeón Francia, el cuatro veces ganador Alemania, así como España, Inglaterra, Portugal, Países Bajos y Bélgica.
El siempre verde Cristiano Ronaldo, que tendrá 41 años cuando comience el torneo, ha dicho que su sexta Copa Mundial con Portugal será la última y que le encantaría coronar su larga carrera con un primer título mundial para su país.
La lista de elenco ampliada también significa una oportunidad para un puñado de clasificados por primera vez, incluidos Cabo Verde, Jordania y la pequeña nación caribeña de Curazao.
Con seis jugadores aún por decidir en los play-offs, los favoritos querrán evitar a Italia, que ganó la Copa del Mundo en 2006 pero no se ha clasificado desde 2014.
A pesar de una campaña de clasificación plagada de errores, los italianos aún pueden llegar a la final si ganan dos partidos a muerte súbita.
El partido inaugural se llevará a cabo en el Estadio Azteca de la Ciudad de México, que también fue sede de las finales de 1970 y 1986, antes de que el torneo se desarrolle durante casi seis semanas y culmine con la final en el Estadio MetLife de Nueva Jersey.
Debido a la complejidad, los equipos solo conocerán los detalles completos de las sedes de sus partidos y los horarios de inicio el sábado, un día después del sorteo.
Los grupos de seguidores han advertido que los aficionados podrían enfrentarse a sumas exorbitantes por las entradas para los partidos más atractivos debido a la decisión de la FIFA de utilizar precios dinámicos de las entradas.
Los precios en sitios web populares del mercado secundario en Estados Unidos, como Stubhub y Seatgeek, ya se han disparado, y los precios para la final de la Copa del Mundo del 19 de julio en Nueva Jersey comienzan en alrededor de 7.000 dólares estadounidenses.
por Andy Scott, AFP