La enseñanza de idiomas, que habitualmente ha sido presencial, ha experimentado una profunda y rápida digitalización. Hoy en día, muchas academias de español utilizan plataformas de gestión del aprendizaje LMS, herramientas de videoconferencia como Zoom y Microsoft Teams, y programas para evaluar a los estudiantes en línea.
Esto ha ampliado el acceso a la enseñanza, pero, por otro lado, también significa que quienes imparten las clases tienen más responsabilidad sobre la información personal que se recoge.
Las academias y profesores ahora procesan categorías sensibles de información, que pueden incluir todo tipo de datos que no consideramos: identificación, contacto, facturación, etc.
Cómo mantener los datos protegidosEl cumplimiento legal en academias de español requiere que se tenga una base legal para tratar datos personales. Esto significa que cada tratamiento de datos debe tener una razón válida según el Artículo 6 del RGPD.
Hay que hacer un inventario de los datos que se recopilan y para qué se usan. Los datos necesarios para la relación contractual, como identificación, matrícula o facturación, se utilizan para cumplir un contrato.
Las bases fundamentalesEn lo que respeta a la educación online, el manejo de los datos personales se basa, principalmente, en dos fundamentos legales: la ejecución de un contrato y el consentimiento explícito.
La primera base permite recopilar y utilizar información básica, ya que son necesarios para brindar el servicio educativo, gestionar pagos, dar acceso al campus virtual o registrar calificaciones. En pocas palabras, datos indispensables para cumplir con las obligaciones que surgen.
El consentimiento explícito se vuelve necesario cuando el uso de los datos no está directamente relacionado con la enseñanza. Esto ocurre, por ejemplo, en actividades de marketing.
¿De quién es la responsabilidad?Cómo academia o tutor, eres el Responsable del Tratamiento de los datos personales, mientras que las plataformas para clases online que utiliza actúan como Encargados del Tratamiento. Esto implica que, aunque ellos proporcionen la tecnología, tú asumes la responsabilidad legal.
Antes de utilizar cualquier servicio, debes firmar un Contrato de Encargado del Tratamiento que especifique qué datos se tratan, con qué fin y bajo tus instrucciones. Si el proveedor usa la información para otras multas —como publicidad— actúa como responsable independiente, lo que puede acarrear sanciones.
Para contratar un servicio EdTech, es esencial seguir una matriz de garantías: tener un DPA firmado, alojar los datos en servidores de la Unión Europea.
Las opciones de clases online.Hoy en día hay diferentes formas de dar y recibir clases online. Esto ayuda a docentes y estudiantes a adaptarse a sus necesidades. Una forma común es usar plataformas de videoconferencia. Ejemplos son las ya populares y mencionadas Zoom, Microsoft Teams y Google Meet.
También existen portales especializados donde podemos encontrar tutores de español en línea que ofrecen sus servicios siendo Tus Clases Particulares uno de los más grandes ejemplos. En estas plataformas, los profesores crean perfiles, fijan tarifas y reciben valoraciones. Los estudiantes pueden comparar opciones y elegir el profesor que mejor se ajusta a sus necesidades.
Herramientas de apoyoCumplir con el RGPD puede parecer complejo, pero existen herramientas de software que facilitan la gestión de la privacidad y los requisitos legales.
Entre ellas, los generadores de política de privacidad son especialmente populares en academias pequeñas. Opciones como Usercentrics ofrecen un punto de partida rápido y gratuito para redactar textos legales básicos que incluyen información obligatoria, como la identificación del responsable o los derechos de los usuarios.
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