ENRIQUECIMIENTO. De acuerdo con el abogado de la parte querellante, Abel Loma, presentó documentación que revela que ha sido beneficiario con una pensión de invalidez, tras haber sido diagnosticado con una enfermedad relacionada con su deterioro respiratorio. La Justicia ordenó que Juan Carlos Huarachi, quien hace poco más de un mes dejó de ser el máximo dirigente de la Central Obrera Boliviana (COB), permanezca en prisión preventiva mientras la Fiscalía continúa con la investigación por los tres delitos por los que fue imputado. La audiencia cautelar se llevó a cabo este martes a partir de las 15:30.
El Ministerio Público imputó a Huarachi por uso indebido de influencias, concusión y enriquecimiento ilícito. Según el fiscal anticorrupción Aldo Meza, existen indicios de un presunto pago irregular de Bs 40.000 por parte de un ministerio, hecho que también involucraría a otras exautoridades.
Durante la audiencia, el fiscal Meza señaló que Huarachi habría incrementado su patrimonio “de manera desproporcionada”. La investigación consideró que recibió de manera irregular los 40.000 bolivianos mencionados, además de diferentes depósitos durante 2022 y 2023 en una de sus cuentas bancarias, según Unitel.
Por ello, el Ministerio Público también informó si otras instituciones, como la Caja Nacional de Salud (CNS), realizaron pagos a Huarachi dentro del mismo esquema.
PENSIÓN DE INVALIDEZ
De acuerdo con el abogado de la parte querellante, Abel Loma, presentó documentación que revela que ha sido beneficiario con una pensión de invalidez, tras haber sido diagnosticado con una enfermedad relacionada con su deterioro respiratorio.
El jurista expresó dudas sobre la veracidad del diagnóstico de Huarachi y sospecha que podría haberse producido un uso indebido de influencias a favor del exdirigente, según informó Erbol.
De acuerdo con los documentos, Huarachi tramitó su pensión de invalidez por haber trabajado como intérprete en la Empresa Minera Huanuni. Según la normativa vigente, la invalidez debe calificarse cuando ya no procede tratamiento curativo y se establece que la afección es permanente e irreversible.
Según los documentos, al exsecretario del ente matriz se le otorgó un certificado médico que establece como fecha de invalidez el 17 de agosto de 2017, debido a un “deterioro respiratorio”. En ese momento, el sindicalista estaba a punto de cumplir 41 años de edad.
En el diagnóstico, revisado por la Entidad Encargada de Calificar en 2022, se indica que Huarachi padecía silicosis pulmonar crónica, gonartrosis bilateral (artrosis de rodilla), hernia de disco y trauma acústico bilateral.
Además, en los documentos del proceso se registra una boleta de pago reciente a favor de Huarachi por un monto superior a 8.000 bolivianos, correspondiente a su pensión de riesgo.